El juez de Garantías Eduardo Silva Pelossi hizo lugar a la solicitud presentada por los padres y hermanas del funcionario universitario asesinado.
La investigación por el crimen de Pedro Pablo Mieres, funcionario de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) hallado muerto en su departamento de barrio Hipódromo, sumó en las últimas horas un cambio clave: el juez de Garantías Eduardo Silva Pelossi resolvió aceptar la presentación de su familia como particular damnificada.
Con esta decisión, los padres y hermanas de Mieres podrán participar activamente en el expediente que tramita en la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N° 3, a cargo del fiscal Gonzalo Petit Bosnic, con el patrocinio de los abogados Cristian Ariel González, Gastón Jesser y Sebastián Irurria.
La aceptación de la querella les permitirá a los familiares acceder a la totalidad de las actuaciones, proponer pruebas, solicitar medidas de investigación y participar en las audiencias que se celebren en el marco de la causa. Se trata de un paso clave para acompañar el trabajo de la fiscalía y ejercer un control directo sobre el avance del proceso.
El crimen que conmocionó a La Plata
Mieres, de 41 años, fue encontrado sin vida el 17 de junio pasado en su vivienda de 115 entre 46 y 47. Estaba desnudo, maniatado y amordazado. La autopsia determinó que murió por asfixia mecánica, probablemente provocada con una prenda de vestir.
En las primeras horas, el caso se investigó como un posible robo, aunque la hipótesis se modificó al detectarse que no hubo signos de violencia en la entrada y que algunos objetos hallados en la escena podrían haber sido colocados para simular un saqueo.
Los acusados
Por el hecho está detenido Nicolás Damián Arévalo, de 39 años, quien fue captado por cámaras de seguridad llegando y saliendo del domicilio de Mieres la noche del crimen. Tiene antecedentes penales y permanece con prisión preventiva por homicidio doblemente agravado criminis causa.
Un segundo imputado, Ronaldo Alexis Iriarte Duarte, de 26 años, fue detenido acusado de encubrimiento y tenencia ilegal de arma de fuego. En un allanamiento se le secuestró uno de los teléfonos celulares de la víctima, una computadora portátil, otros dispositivos electrónicos y una pistola Glock con municiones.
Lo que viene
Fuentes judiciales indicaron que la causa se encuentra en plena etapa de investigación penal preparatoria y que, con la familia ya incorporada como particular damnificada, es probable que se intensifiquen las diligencias.
La comunidad universitaria sigue de cerca cada novedad del expediente, reclamando justicia por Mieres, recordado por su compromiso social, su trabajo en la Secretaría de Asuntos Estudiantiles de la Facultad de Ciencias Exactas y su participación en iniciativas solidarias como las Brigadas Ramona Medina y los operativos de vacunación durante la pandemia.