jueves, julio 31

¿Qué pasó y dónde están los condenados por la salidera a Carolina Piparo en La Plata?


A 15 años de la salidera bancaria que terminó con la vida de Isidro, el bebé de Carolina Piparo, un repaso por la situación actual de los cinco condenados.


El 29 de julio de 2010, Carolina Piparo, embarazada de 39 semanas, fue víctima de una brutal salidera bancaria en pleno centro de La Plata. Todo ocurrió cerca de las 11 de ese jueves, luego de que extrajera dinero en la sucursal 19 del Banco Santander Río que estaba en 7 y 42. Mientras salía acompañada por su madre, María Emma Cometa, fue señalada dentro del banco por dos hombres que simulaban ser clientes. Afuera, otros integrantes de la banda comenzaron a seguirla.

A pocas cuadras de su domicilio, en 36 y 21, fue interceptada por dos asaltantes a bordo de una moto roja. Uno de ellos la sorprendió cuando se disponía a bajar del auto, la golpeó con la culata de un arma y, mientras ella se encontraba de rodillas en el suelo, le disparó a corta distancia. El proyectil ingresó por el mentón y le atravesó el pulmón derecho.


Gravemente herida, fue trasladada de urgencia al Hospital San Roque de Gonnet, donde los médicos realizaron una cesárea de emergencia. Su hijo Isidro Buzali nació con vida, pero falleció una semana más tarde por las lesiones derivadas de la agresión.


La investigación fue rápida y contundente. Los fiscales Marcelo RomeroMaribel Furnus y Ana Medina coordinaron un trabajo exhaustivo que derivó en el juicio oral en 2013.

En esa instancia, el Tribunal Oral en lo Criminal N° 2 de La Plata condenó a cinco hombres con penas de prisión perpetua. Sin embargo, años más tarde, en 2015, la Sala I del Tribunal de Casación Penal bonaerense -integrada por los jueces Daniel CarralBenjamín Sal Llargués y Víctor Violini– modificó la calificación legal y redujo sensiblemente las penas.


Las condenas firmes y los lugares de detención

A 15 años del hecho, todos los autores del ataque están cumpliendo condenas temporales y en algunos casos muy cerca de acceder a beneficios carcelarios como salidas transitorias, ya que llevan detenidos desde agosto de 2010. Estas son sus situaciones actuales al cierre de esta nota:

Carlos Fabián Moreno alias “Carlín”: fue señalado como el autor material del disparo. Su condena firme es de 25 años de prisión. Actualmente se encuentra alojado en la Unidad Penal 28 de Magdalena, bajo la órbita del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB).


Carlos Jordán Juárez: considerado el jefe de la banda. También recibió 25 años de condena. Cumple su pena en la Unidad Penal 1 de Lisandro Olmos, uno de los penales más grandes del país.


Juan Manuel Calvimonte: tuvo a cargo la logística del golpe. Fue condenado a 24 años de prisión y declarado reincidente. Está detenido en la Unidad Penal 9 de La Plata, ubicada a metros del centro de la ciudad.


Luciano Leonel Mario López: condujo la moto en la que escaparon tras disparar a Piparo. Su pena es de 23 años de prisión. Se encuentra recluido en la Unidad Penal 2 de Sierra Chica, en el partido de Olavarría.


Miguel Ángel “Pimienta” Silva: fue el “marcador” dentro del banco. También recibió una condena de 23 años, pero falleció en su casa en La Matanza luego de ser excarcelado por razones de salud. Había sufrido un accidente cerebrovascular grave estando en prisión, y Carolina Piparo no se opuso a su excarcelación humanitaria.


15 años en prisión

Los condenados llevan 15 años detenidos. Según la legislación vigente, si demostraron buena conducta, dentro de unos cinco años se encuentran en condiciones de comenzar a acceder a beneficios progresivos de salidas transitorias. La ley penal, en consonancia con la Constitución Nacional, establece que el encierro no debe ser un castigo sino una herramienta para la readaptación social.

Para estos reos con condenas firmes, el único beneficio de salidas transitorias que pueden obtener es a razón de un día por cada año de prisión cumplida en los cuales haya efectivamente trabajado o estudiado.

Este beneficio solo es posible en los últimos seis meses de su condena previa al otorgamiento de la libertad condicional, si correspondiere, siempre que se cumplan ciertas condiciones, según establece la “Ley de Ejecución Penal Bonaerense” número 12.256, que regula la asistencia y tratamiento de procesados y condenados a penas privativas o restrictivas de libertad, buscando su inserción social.


El fallo de Casación que lo cambió todo

El Tribunal Oral N° 2 de La Plata, compuesto por los jueces Silvia HoerrClaudio Bernard y Liliana Torrisi, había aplicado penas de prisión perpetua por los delitos de “tentativa de homicidio criminis causa”, “homicidio criminis causa (por la muerte del bebé)”, y “robo calificado por el uso de arma de fuego”. Sin embargo, en febrero de 2015, el fallo fue revisado por la Sala I del Tribunal de Casación Penal bonaerense, que consideró que la calificación jurídica debía ser otra.


La nueva interpretación, plasmada en un extenso acuerdo de 90 páginas, sostuvo que los hechos debían encuadrarse como “homicidio calificado criminis causa en grado de tentativa, en concurso real con robo calificado por el uso de arma de fuego, en concurso ideal con homicidio en ocasión de robo”.

Esta modificación supuso una reducción de penas: ya no se trataba de prisión perpetua sino de condenas temporales, entre 23 y 25 años, lo que generó indignación en la sociedad y en la propia Carolina Piparo, quien expresó públicamente su desacuerdo en aquel momento.

La resolución, sin embargo, fue técnica y jurídica. Los camaristas argumentaron que no se probó el dolo directo de matar, sino que el homicidio se produjo como consecuencia del accionar violento delictivo. Esta recalificación benefició no solo a los cinco condenados, sino también a Augusto Claramonte -otro de los acusados- quien fue absuelto por falta de pruebas en su contra.


El recuerdo de Isidro y el debate sobre la justicia

El crimen que terminó con la vida de Isidro marcó un antes y un después en la sociedad platense. La imagen de Carolina Piparo internada en el Hospital de Gonnet, con un disparo en el rostro y su bebé recién nacido agonizando, se convirtió en una postal del horror que puede provocar la inseguridad.


Durante años, la causa fue seguida de cerca por medios, organizaciones sociales y referentes políticos. Piparo, inició una carrera política, fue legisladora provincial primero y nacional hasta este año, impulsando proyectos de ley vinculados a la asistencia a víctimas y endurecimiento de penas.

A 15 años del hecho, el caso vuelve a estar en el centro del debate. La posibilidad de que algunos de los condenados accedan a beneficios carcelarios genera controversia. Sin embargo, el marco legal es claro: la reinserción social es parte del objetivo del sistema penitenciario argentino.

La sociedad, por su parte, mantiene viva la memoria de Isidro. En redes sociales o actos conmemorativos, su nombre resuena como símbolo de una vida arrebatada por la violencia, pero también como recordatorio de que la justicia y la memoria no pueden ser indiferentes.