miércoles, julio 23

Inseguridad en La Plata: ladrones se hicieron pasar por policías de la DDI y desvalijaron a dos jubiladas


La inseguridad no da respiro y cuatro delincuentes robaron a dos jubiladas de 67 y 75 años en La Plata. Escaparon con un importante botín.


Un violento hecho de inseguridad sacudió a los vecinos de Plaza Malvinas durante la madrugada de este martes, cuando cuatro delincuentes encapuchados y armados irrumpieron en una vivienda de La Plata y desvalijaron a dos jubiladas. El hecho sucedió cerca de las 3.30 y todavía no hay detenidos.

Según indicaron fuentes policiales, los asaltantes sorprendieron a las víctimas, dos mujeres de 67 y 75 años, mientras dormían y uno de ellos inmovilizó a la dueña de casa, le tapó la boca y le susurró que no gritara porque eran “de la DDI”, en alusión a la Dirección Departamental de Investigaciones local. Todos llevaban ropa oscura, guantes y el rostro cubierto.


Mientras uno vigilaba un handy del que se escuchaban voces femeninas, los otros tres revisaron a fondo la propiedad ubicada en 20 entre 55 y 56 en busca de dinero y objetos de valor. Revolvieron todas las habitaciones hasta que uno de ellos encontró una caja empotrada en una habitación en desuso, de la que sustrajeron 300.000 pesos en efectivo. Luego escaparon por la puerta principal.


Tras el hecho, las víctimas encontraron sus celulares escondidos debajo de una cama, lo que hace suponer que los ladrones intentaron evitar que pidieran ayuda rápidamente. La causa fue caratulada como “robo agravado en poblado y en banda” y quedó en manos de la UFI N°9 del Departamento Judicial La Plata.

Una modalidad que se repite en La Plata

El brutal robo sufrido por las dos jubiladas se suma a otro ataque ocurrido apenas 24 horas antes, también en La Plata. En ese caso, cuatro delincuentes armados y encapuchados irrumpieron en una vivienda de 28 entre 54 y 55, en la zona de Parque San Martín, donde sorprendieron a dos hermanas de 83 y 85 años mientras dormían.


Las víctimas fueron atadas y sometidas durante más de 40 minutos mientras los asaltantes revolvían toda la propiedad. El botín incluyó 1.000 dólares, 1.000.000 de pesos, joyas de valor y hasta una pistola antigua. Ambos hechos comparten un patrón: ataques nocturnos, extrema violencia y una selección premeditada de víctimas adultas mayores, lo que refuerza la hipótesis de una modalidad delictiva que crece en la región.